7 - El Papa: Infalible

Capítulo 7

El Papa: Infalible
 
De acuerdo a la doctrina católica, el papa es infalible en materia de doctrina, fe y moral. 

"Para mantener a la Iglesia en la pureza de la fe transmitida por los apóstoles, Cristo, que es la Verdad, quiso conferir a su Iglesia una parti-cipación en su propia infalibilidad. Por medio del 'sentido sobrenatural de la fe', el Pueblo de Dios 'se une indefectiblemente a la fe', bajo la guía del Magisterio vivo de la Iglesia" (p. 262, #889). 

El Catecismo reafirma la misma creencia de la siguiente manera: 

"El Romano Pontífice, Cabeza del Colegio episcopal, goza de esta infalibilidad en virtud de su ministerio cuando, como Pastor y Maestro supremo de todos los fieles que confirma en la fe a sus hermanos, proclama por un acto definitivo la doctrina en cuestiones de fe y moral... Esta infalibilidad abarca todo el depósito de la Revelación divina" (p. 262, #891). 

Desafortunadamente, esta doctrina es sólo otra tradición de hombres que contradice la enseñanza de las Sagradas Escrituras. La Biblia declara que todos somos pecadores. Nadie es perfecto o infalible: 

"Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios".Romanos 3:23 

"Como está escrito: No hay justo, ni aun uno."Romanos 3:10 

Notemos que la Biblia no dice, "ni aun uno, excepto el papa". Jesucristo es la única persona infalible que haya vivido jamás: 

"Al que no conoció pecado (Jesucristo), por nosotros (Dios) lo hizo pecado".
2 Corintios 5:21 

¿Hay también otros católicos infalibles?
 
El Catecismo afirma que otros líderes católicos también han alcanzado el estado de infalibilidad: 


 "El oficio pastoral del Magisterio está dirigido, así, a velar para que el Pueblo de Dios perma-nezca en la verdad que libera. Para cumplir este servicio, Cristo ha dotado a los pastores con el crisma de infalibilidad en materia de fe y de costumbres" (p. 262, #890). 
 
"La infalibilidad del Magisterio de los pastores se extiende a todos los elementos de doctrina, comprendida la moral, sin los cuales las verdades salvíficas de la fe no pueden ser salvaguardadas, expuestas u observadas" (p. 567, #2051). 

Es importante comprender que Dios no declaró que estas personas son infalibles, sino que lo hicieron personas pecadoras.
En la Biblia abundan historias de personas que pecaron contra Dios. Inclusive aquellos a quienes más usó Dios, fueron pecadores. Por ejemplo, Dios se refirió al rey David como "varón conforme a mi corazón" (Hechos 13:22). Sin embargo, entre otros hechos de David, debemos recordar que él adulteró y mató.
Pablo y los otros apóstoles fueron pecadores. Pablo dijo de sí mismo: 

"A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo".Efesios 3:8 


De acuerdo a la Biblia, nadie fue infalible, excepto Jesucristo. 

Más preguntas

Además de no tener fundamento bíblico, esta doctrina levanta otras preguntas que usted debe responder: 

• Cuando el papa y otros líderes católicos —que dicen ser infalibles— están en desacuerdo con la santa Palabra de Dios, entonces Dios debe estar equivocado. ¿Está usted dispuesto a aceptar esta idea?
• ¿Por qué la Iglesia Católica desea que usted crea que el papa y otros líderes católicos son infalibles en materia de doctrina? ¿Será para que los miembros estén más sujetos y sean más obedientes a la Iglesia Católica?
• ¿Dónde adquieren hombres falibles la autoridad para declarar infalibles a otros hombres?
• ¿Por qué la Iglesia Católica rehúsa dar honor a Jesucristo reconociendo que El es el único infalible, tal como la Biblia enseña?
Conclusión
Esta es otra tradición de hombres que presenta más preguntas que respuestas.
Por favor, no acepte a ciegas esta doctrina católica como verdadera. Acuda a la Palabra de Dios para encontrar respuesta a las preguntas planteadas, y luego llegue a una decisión en su corazón. 

"Y habiendo (Jesucristo) sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen".Hebreos 5:9

8 - Los Sacramentos Salvan

Capítulo 8

Los Sacramentos Salvan


¿Son los sacramentos necesarios para la salvación? 

"La Iglesia afirma que para los creyentes los sacramentos de la Nueva Alianza son necesarios para la salvación" (p. 327, #1129).


¿Cuáles son los sacramentos? 

"Hay en la Iglesia siete sacramentos: Bautismo, Confirmación o Crismación, Eucaristía, Peni-tencia, Unción de los enfermos, Orden sacerdotal y Matrimonio" (pp. 322-323, #1113).


Estos siete sacramentos sólo constituyen una serie de buenas obras. Como vimos en capítulos anteriores, la Biblia enseña una y otra vez que las buenas obras nunca salvarán a nadie:

"Ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él". Romanos 3:20 

Esto es lo que Dios piensa de nuestras buenas obras:

"Si bien todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia".
Isaías 64:6 


¿Debe una persona ser católica para ser salva?

Puesto que los sacramentos supuestamente son necesarios para obtener salvación, y éstos sólo se obtienen mediante la Iglesia Católica, es obvio que la persona debe ser miembro fiel de la Iglesia Católica para ser salva.

Aunque usted nunca oirá a un portavoz del catolicismo que admita esta realidad, eso es exactamente lo que implica esta doctrina católica.

Permítame preguntarle nuevamente, ¿puede aceptar usted que todos los que no son miembros de la Iglesia Católica arderán para siempre en el infierno?

Tradiciones de hombres

Por favor, comprenda que estos sacramentos que la Iglesia Católica considera necesarios para la salvación, ni siquiera fueron dados por Dios. Son reglamentos hechos por hombres y que han sido transmitidos de generación a generación.

Por tanto, cuando usted cumple estos sacramentos, no está obedeciendo a Dios, sino tradiciones de hombres.

Bajo tales condiciones, uno debe preguntarse si los sacramentos son realmente necesarios, o si la Iglesia Católica usa tradiciones de hombres para atemori-zar a la gente con la amenaza de eterna condenación, para que obedezcan a la iglesia de por vida.


Salvación: ¿por medio de Cristo o los sacramentos?


Si los sacramentos son necesarios para la salvación, ¿por qué la Palabra de Dios declara lo siguiente?


"Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre".Juan 20:31 

El apóstol Pablo pronunció estas palabras al respecto:


"Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios".1 Corintios 1:18 


Amigo católico: ¿Cree usted que buenas obras, como los sacramentos, son necesarias para la salvación? ¿Considera usted insensato creer que la salvación se obtiene sólo por medio de la fe en la obra de Cristo en la cruz? Si es así, la Palabra de Dios advierte que usted perecerá en el infierno.
Cuando Cristo declaró que la salvación se obtiene únicamente por medio de El, no sólo dijo la verdad, sino que repitió lo que escuchó de su Padre:


"Pero ahora procuráis matarme a mí, hombre que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios".
Juan 8:40 


Al sugerir que Cristo está equivocado, también sugerimos que el Padre está equivocado. Jesucristo continúa explicando por qué la gente rehúsa creer en sus palabras:

"El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque no sois de Dios".
Juan 8:47 


Para aceptar esta doctrina católica, usted debe negarse a escuchar las palabras de Dios. Y si hace esto, de acuerdo a Jesucristo, usted no es de Dios.

Amigo católico romano, ¿está seguro, sin ninguna sombra de duda, de que usted es de Dios?
¿Está dispuesto a dar la espalda a la Palabra de Dios, para aceptar palabras de hombres? Si es así, usted tiene razón para estar preocupado:

"Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres".Hechos 5:29

9 - El Pecado de Presunción

Capítulo 9

El Pecado de Presunción

El catolicismo enseña que si una persona cree tener la seguridad de que irá al cielo cuando muera, comete el pecado de presunción: 

"Hay dos clases de presunción. O bien el hombre presume de sus capacidades (esperando poder salvarse sin la ayuda de lo alto), o bien presume de la omnipotencia o de la misericordia divinas (esperando obtener su perdón sin conversión y la gloria sin mérito)" (p. 580, #2092). 


Al tomar esta posición, la Iglesia Católica una vez más se opone a la Palabra de Dios: 


"Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios".1 Juan 5:13 

Deténgase por un momento y piense: Si hay un lugar llamado cielo, un paraíso maravilloso que nuestra imaginación no alcanza a comprender, y si hay un lugar de tormento eterno llamado infierno, ¿no nos diría el Dios amoroso cómo obtener el cielo y evitar el infierno?

¿Permitiría Dios que viviéramos toda la vida sin saber cómo escapar de las llamas del infierno y sin la seguridad de que disfrutaremos del paraíso con El?

¿Cree que el Dios de amor diría: "Haz todas las obras buenas que puedas, luego cruza los dedos, y espera poder alcanzar lo mejor cuando algún día tengas que estar delante de mí"?

¡No, eso no es amor, sino tortura! Es crueldad de la peor clase. Un Dios de amor nos daría un plan claro y simple, para explicarnos cómo evitar ese terrible lugar de tormento y para darnos la seguridad de que iremos al cielo. Y El nos dio ese plan:


"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna".Juan 3:16


La Biblia declara que todos los que reciben a Cristo por fe y ponen su confianza en El, pueden estar seguros ahora de que tienen vida eterna:


"El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él". Juan 3:36 


"El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida". Juan 5:24 

No es pecado afirmar que usted irá al cielo si ha nacido en la familia de Dios por medio de la fe en Cristo. La seguridad de la salvación es un hecho bíblico y una preciosa promesa del Señor Jesucristo. Nunca es presunción creer en lo que Dios dice. De hecho, Dios se alegra cuando creemos en El:

"Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano". Juan 10:27-28 

El Señor desea que sus hijos confíen en que han nacido en la familia de Dios, y que tienen su destino eterno asegurado:

"De cierto, de cierto os digo: El cree en mí, tiene vida eterna".Juan 6:47 

La promesa no dice que algún día usted podrá tener vida eterna, si hace suficientes obras buenas. Usted puede tener vida eterna ahora mismo. Esta es la voluntad de Dios. Jesucristo dijo:

"Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero".Juan 6:40 


Pablo no consideró presuntuoso declarar que él iba camino al cielo:


"Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor".Filipenses 1:23 


Apreciado amigo católico, ¿no comprende que esta doctrina lo mantiene esclavo? La Iglesia Católica no desea que usted sepa que su destino eterno ya está asegurado, porque entonces ya no necesitaría a la iglesia.

Cuán trágico es que los católicos vivan en sujeción, sirviendo a la iglesia con la esperanza de ganar el cielo, cuando el deseo de Dios es que usted tenga ahora la seguridad del cielo:


"En la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no miente, prometió desde antes del principio de los siglos".Tito 1:2 


"Y esta es la promesa que él nos hizo, la vida eterna".1 Juan 2:25 


Usted debe nacer de nuevo

Para tener la seguridad de la vida eterna, usted debe nacer de nuevo:

"Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios".Juan 3:3 


Para nacer de nuevo, debe recibir por fe a Jesucristo como su Salvador personal y confiar sólo en El para su salvación. Cuando lo haga, usted nacerá en la familia de Dios.


"Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios".Juan 1:12 


Desde el momento en que sea parte de la familia de Dios, llegará a ser coheredero con Jesucristo:

"Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo".Romanos 8:17 


Como heredero, no tiene que preocuparse de su futuro. Dios le prometió:

"Una herencia incorruptible, incon-taminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros".
1 Pedro 1:4 


¿No es hermosa esta promesa? En los cielos ya está reservada una herencia eterna para quienes llegan a ser hijos de Dios. A los que confiaban en él, Jesucristo les dijo:


"En la casa de mi Padre muchas mora-das hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros".Juan 14:2 


¿Ve usted la verdadera naturaleza de Dios? El le ama y desea que sepa que no es presunción creer en su Palabra y confiar en su bondad. Dios le ama y desea que usted sepa que tiene vida eterna... ¡ahora mismo!

Rompiendo las cadenas


Dios no desea que esté sujeto a una religión de obras. El quiere tener una relación personal con usted, basada en la maravillosa gracia divina. Dios no desea que viva preocupado, preguntándose dónde pasará la eternidad.



¿Presunción o Fe?

No es presunción creer en lo que Dios promete. Eso se llama fe. Cuando Jesucristo estuvo en la tierra, dio esta promesa a todos los que creían en El:

"Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis".Juan 14:3 

Confíe en Jesucristo ahora mismo. Se alegrará de haberlo hecho.

"Porque Jehová ama la rectitud, y no desampara a sus santos. Para siempre serán guardados; mas la descendencia de los impíos será destruida".Salmos 37:28

10 - El Bautismo de Niños

Capítulo 10

El Bautismo de Niños

El bautismo de niños es una de las doctrinas más críticas de la Iglesia Católica: 


"Puesto que nacen con una naturaleza humana caída y manchada por el pecado original, los niños necesitan también el nuevo nacimiento en el Bautismo para ser librados del poder de las tinieblas y ser trasladados al dominio de la libertad de los hijos de Dios, a la que todos los hombres están llamados. La pura gratuidad de la gracia de la salvación se manifiesta particularmente en el bautismo de niños. Por tanto, la Iglesia y los padres privarían al niño de la gracia inestimable de ser hijo de Dios si no le aministraran el Bautismo poco después de su nacimiento" (p. 358, #1250). 


El Catecismo nos indica dónde se originó esta doctrina fundamental: 


"La práctica de bautizar a los niños pequeños es una tradición inmemorial de la Iglesia. Está atestiguada explícitamente desde el siglo II" (p. 359, #1252 —itálicas añadidas por el autor). 

Aquí el Catecismo admite que esta doctrina no está basada en las Escrituras. Es una tradición hecha por hombres. Al respecto, la advertencia de Pablo es muy oportuna: 

"Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo".Colosenses 2:8 



El Bautismo en la Biblia


Esta práctica perturba en especial porque la Biblia no registra ni un solo caso en que un niño haya sido bautizado. Por el contrario, en cada ocasión en que se menciona el bautismo, quienes participan son personas con edad suficiente para escuchar y recibir el evangelio. 


"Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua".Mateo 3:16 


A través de la Biblia vemos que el bautismo siempre siguió a la salvación. El etíope eunuco, quien fue guiado por Felipe para creer en Cristo y ser salvo, era adulto cuando fue bautizado: 


"Y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó".Hechos 8:38 


Otros fueron bautizados después que creyeron: 


"Y Crispo, el principal de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su casa; y muchos de los corintios, oyendo, creían y eran bautizados".Hechos 18:8 


Cuando la gente aceptaba el llamado de Juan el Bautista al arrepentimiento, ellos 

"eran bautizados por él en el Jordán, confesando sus pecados".Mateo 3:6 


Es obvio que los recién nacidos no podían arrepentirse, creer, ni confesar sus pecados. Por tanto, nunca podrían estar capacitados para ser bautizados como enseña la Biblia. 


El carcelero de Filipos

Cuando el carcelero que custodiaba al apóstol Pablo en Filipos le preguntó: "¿Qué debo hacer para ser salvo?" (Hechos 16:30), Pablo respondió: "Cree en el Señor Jesucristo" (v. 31). Después que el carcelero creyó, Pablo lo bautizó (v. 33). 

Cuando Pedro predicó en Hechos 2: 


"... los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas".Hechos 2:41 


Cuando Felipe predicó a la gente de Samaria, hombres y mujeres fueron bautizados, pero no se indica que bautizaron a bebés: 

"Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres".Hechos 8:12 


Si la Biblia es explícita al mostrar que sólo deben ser bautizados quienes tienen edad suficiente para oír y recibir la Palabra de Dios, ¿por qué el catoli-cismo demanda que los bebés recién nacidos sean bautizados? ¿Será acaso para que las personas estén sujetas a la iglesia casi inmediatamente después de nacer? Usted debe tomar una decisión al respecto en su corazón. 


Conclusión


Cuando usted fue bautizado siendo bebé, ¿fue realmente bautizado, o sólo le rociaron un poco de agua? Esto depende de cuál posición desea creer —la Palabra de Dios o las tradiciones de hombres. Por favor, tenga en mente las palabras que Jesús pronunció ante los líderes religiosos de su época: 

"Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición".
Marcos 7:9

11 - Grados de Pecado

Capítulo 11

Grados de Pecado


El Catecismo enseña a los católicos que hay diversos grados de pecado: 

"Conviene valorar los pecados según su gravedad" (p. 521, #1854). 

Primero están los pecados veniales: 

"Se comete un pecado venial cuando no se observa en una materia leve la medida prescrita por la ley moral, o cuando se desobedece a la ley moral en materia grave, pero sin pleno conocimiento o sin entero consentimiento" (pp. 522-523, #1862). 

Luego están los pecados mortales: 

"El pecado mortal... Entraña la pérdida de la caridad y la privación de la gracia santificante, es decir, del estado de gracia. Si no es rescatado por el arrepentimiento y el perdón de Dios, causa la exclusión del Reino de Cristo y la muerte eterna del infierno..." (p. 522, #1861).
(Véase también p. 294, #1014; p. 299, #1033; p. 300, #1035; y p. 301, #1037). 

Ante la amenaza de "la muerte eterna del infierno" sobre su vida, es necesario dar respuesta a varias preguntas importantes: 


• Específicamente, ¿qué constituye pecado mortal?
• ¿Cuánto arrepentimiento se necesita para ser perdonado?
• ¿Cómo sé que una persona ha sido perdonada?
• ¿Por qué la Biblia no dice nada al respecto?


Lamentablemente el Catecismo no da respuesta a ninguna de estas preguntas.
¿Qué enseña la Biblia?
 
Cuando estudiamos la santa Palabra de Dios, ob-tenemos un cuadro totalmente diferente: 

"Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el pecado es infracción de la ley".1 Juan 3:4 


Puesto que todos hemos quebrantado algún mandamiento de Dios, la Biblia declara que todos somos pecadores. 


"Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios".
Romanos 3:23 

Debido al pecado, todos merecemos morir y sufrir el castigo del infierno: 


"La paga del pecado es muerte..." Romanos 6:23 

La Palabra de Dios no hace distinción acerca de la gravedad de ciertos pecados. Sencillamente declara que la paga del pecado es muerte.
Pero Dios, por su gran amor y gracia, envió a su Hijo, Jesucristo, a morir en la cruz para pagar el precio de todos los pecados una vez y para siempre: 

"Pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios".Hebreos 10:12 


La salvación verdadera sólo se obtiene por medio de Jesucristo, porque únicamente El pudo derramar sangre inocente para pagar el castigo por todos los pecados:

"En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados". Colosenses 1:14 

"Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados".Mateo 26:28 

 
Dios espera que sus hijos le confiesen sus pecados a El, pero una vez que los pecados son confesados y perdonados, Dios hace una promesa maravillosa: 

"Nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones".Hebreos 10:17 


Jesús nuevamente es despojado de su lugar

Por medio de esta enseñanza se le roba a Jesucristo la honra que le pertenece. Debido al acto de amor del Señor en la cruz, sólo El merece crédito por perdonar los pecados de la humanidad. 

El catolicismo, sin embargo —al declarar que hombres pecadores pueden ayudar a pagar diversos grados de pecado mediante sus buenas obras—, rebaja al Señor y le roba el honor y la gloria que únicamente El merece.

Conclusión

Una vez más, usted debe elegir. ¿Permanecerá sujeto al catolicismo, creyendo que algunos pecados son peores que otros, y que las buenas obras son necesarias para pagar por los diferentes grados de pecado?
¿O, confiará usted en la Palabra de Dios, la cual declara que Jesús murió para pagar el precio de todos los pecados, una vez y para siempre: 

"Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras". 1 Corintios 15:3

12 - La Doctrina de la Transubstanciación

Capítulo 12

La Doctrina de la Transubstanciación


Durante la misa, los sacerdotes supuestamente poseen el poder de convertir en forma sobrenatural el pan y el vino, en el cuerpo y sangre reales y literales de Jesucristo:

"El Concilio de Trento resume la fe católica cuando afirma: 'Porque Cristo, nuestro Redentor, dijo que lo que ofrecía bajo la especie de pan era verdaderamente su Cuerpo, se ha mantenido siempre en la Iglesia esta convicción, que declara de nuevo el Santo Concilio: por la consagración del pan y del vino se opera el cambio de toda la substancia del pan en la substancia del Cuerpo de Cristo nuestro Señor y de toda la substancia del vino en la substancia de su Sangre; la Iglesia católica ha llamado justa y apropiadamente a este cambio transubstanciación'" (p. 393, #1376).


Esta cita del Catecismo revela que la Iglesia Católica aún sostiene esta doctrina que fue definida en el Concilio de Trento: 


"En el corazón de la celebración de la Eucaristía se encuentran el pan y el vino que, por las palabras de Cristo y por la invocación del Espíritu Santo, se convierten en el Cuerpo y la Sangre de Cristo" (p. 379, #1333).


El Catecismo aun especifica cuándo viene Cristo en la eucaristía y cuánto tiempo permanece allí: 


"La presencia eucarística de Cristo comienza en el momento de la consagración y dura todo el tiempo que subsistan las especies eucarísticas. Cristo está todo entero presente en cada una de las especies y todo entero en cada una de sus partes, de modo que la fracción del pan no divide a Cristo" (p. 394, #1377).

Puesto que el catolicismo enseña a sus miembros a tomar parte de un canibalismo literal, esta doctrina requiere serio examen. Para principiar, determinemos el origen de esta doctrina. ¿Es doctrina de Dios, o es tradición de hombres? El catolicismo afirma que es doctrina bíblica y cita las palabras de Jesús en Juan 6: 

"Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero".Juan 6:53-54



Aunque este versículo pareciera enseñar canibalismo, podemos comprender claramente el significado al leer el pasaje completo en su contexto. Justamente antes de hacer tal declaración, Jesús dijo:


"Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo. Le dijeron: Señor, danos siempre este pan. Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás". Juan 6:33-35 


Esta enseñanza armoniza con el resto de las Escrituras. La vida eterna se obtiene al creer en Jesucristo, no al comer su cuerpo. El Señor aclara aún más este pensamiento:


"Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna".Juan 6:40 


Una vez más Jesús indica que tenemos vida eterna al creer en El. Cuando sus discípulos murmuraron al escuchar estas palabras, el Señor les explicó: 


"El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida".Juan 6:63 


Jesús hizo esta declaración en sentido espiritual, no físico. El estaba explicando que, espiritualmente, la vida se obtiene por fe en El, no comiendo su cuerpo. 

Dios no aprueba el canibalismo en ningún lugar de la Biblia. De hecho, El prohibe tal práctica: 


"Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis". Génesis 9:4



"Ninguna persona de vosotros comerá sangre, ni el extranjero que mora entre vosotros comerá sangre". Levítico 17:12 


Dios nunca ordenaría a sus hijos que hicieran algo que El había prohibido.


El propósito bíblico

Las instrucciones de Pablo en 1 Corintios 11 aclaran aún más este tema:

"Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan; y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí".  1 Corintios 11:23-24 

Cuando Jesús dijo: "Tomad, comed; esto es mi cuerpo", El no estaba dando a entender que comieran su cuerpo literal. Aun sugerir tal idea es ridículo. El estaba hablando en sentido espiritual de lo que pronto haría en la cruz. 

Notemos cómo finaliza este versículo: "Haced esto en memoria de mí". La observancia de la Santa Cena es una conmemoración de la obra de Cristo en el Calvario, no una nueva realización de ese hecho. Lo mismo debemos decir acerca de la sangre de Cristo: 

"Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí". 1 Corintios 11:25 


Jesús mismo enseñó esta lección a sus discípulos en la última cena:

"Y (Jesús) tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí". Lucas 22:19


Conclusión


Puesto que la transubstanciación es otra tradición católica que no es apoyada por la Biblia, sino que fue creada por hombres, surgen otras preguntas que esperan respuesta:
• ¿Por qué la Iglesia Católica deliberadamente separa un versículo bíblico de su contexto y desarrolla una doctrina que la Biblia obviamente no enseña?
• ¿Por qué la Iglesia Católica prefiere que usted coma a Cristo en lugar de poner su fe en El?
• Más importante aún, ¿puede usted conscientemente tomar parte de esta práctica ahora que conoce la verdad?
"Y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado". Santiago 4:17

13 - La Eucaristía: Nos Guarda del Pecado

Capítulo 13


La Eucaristía: Nos Guarda del Pecado

¿Tiene la Eucaristía el poder de purificar a los católicos de los pecados cometidos y de protegerlos de futuros pecados? 

"Por eso la Eucaristía no puede unirnos a Cristo sin purificarnos al mismo tiempo de los pecados cometidos y preservarnos de futuros pecados" (p. 399, #1393). 


"Por la misma caridad que enciende en nosotros, la Eucaristía nos preserva de futuros pecados mortales" (p. 399, #1395). 


Una vez más, las enseñanzas de la Palabra de Dios y de la tradición católica son completamente  diferentes. Respecto a la purificación de los pecados pasados, la Biblia declara que todos los pecados son limpiados por medio de la sangre de Jesucristo: 


"... la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado". 1 Juan 1:7 


"Y de Jesucristo, el testigo fiel... Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre". Apocalipsis 1:5


El Catecismo le quita a Cristo el crédito de ser el único que puede purificar a las personas de sus pecados, y le atribuye esa capacidad a una hostia. ¿Por qué es rebajado Jesús nuevamente? 


"Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios".1 Corintios 6:11 

La Eucaristía protege de pecados futuros

En ningún lugar de la Biblia se enseña que comer un trozo de pan guardará a la persona de cometer pecados futuros. La única función práctica de esta doctrina es hacer que la gente vuelva a la Iglesia Católica para recibir la Eucaristía, con la esperanza de que les ayude a no caer en pecado. 

Aparte de mantener a la gente en sujeción a la iglesia, esta práctica no logra ningún otro resultado. 

Vemos así que esta doctrina no se basa en la Palabra de Dios. Sin embargo, ésta nos dice cómo podemos protegernos del pecado: 


"En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti". Salmos 119:11 


"¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra".Salmos 119:9 

Para protegerse del pecado, Dios sugiere que lea, memorice y obedezca la Biblia. Curiosamente, la Iglesia Católica no concuerda con esta enseñanza. Al parecer, los líderes católicos prefieren que usted acuda a la iglesia en busca de ayuda, en vez de acudir a la Palabra de Dios. 

A usted le toca determinar cuál es el motivo: 


"Jehová te guardará de todo mal...". Salmos 121:7 


"Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; con cánticos de liberación me rodearás. Selah".  Salmos 32:7 

"Y el Señor me librará de toda obra mala, y me preservará para su reino celestial. A él sea gloria por los siglos de los siglos. Amén". 2 Timoteo 4:18


Conclusión

Para purificarlo de pecados del pasado y protegerlo de pecados futuros, el catolicismo demanda que usted dependa de un trozo de pan.
Es imperativo que comprenda que esta tradición de hombres contradice directamente a la Palabra de Dios. Para obedecer esta doctrina católica, usted debe rechazar las Sagradas Escrituras.

"Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén."
Judas 1:24-25

14 - La Eucaristía: Ayuda a los Muertos

Capítulo 14


La Eucaristía: Ayuda a los Muertos

Participar de la Eucaristía supuestamente da a los católicos la oportunidad de ayudar a los muertos: 

"El sacrificio eucarístico es también ofrecido por los fieles difuntos 'que han muerto en Cristo y todavía no están plenamente purificados', para que puedan entrar en la luz y la paz de Cristo" (p. 391, #1371). 

"Cuando la celebración tiene lugar en la iglesia, la Eucaristía es el corazón de la realidad pascual de la muerte cristiana. La Iglesia expresa entonces su comunión eficaz con el difunto..." (p. 481, #1689). 

Esta doctrina —que apela a los sentimientos— inculca a los católicos la creencia de que, al recibir la Eucaristía, ayudarán a los seres queridos ya fallecidos a llegar más rápidamente al cielo.
Si esta doctrina es de Dios, usted debe obedecerla. Pero, si es una tradición creada por hombres para mantener a las personas en sujeción a una iglesia, entonces es un método cruel y carente de piedad para controlar a la gente. Veamos lo que dice Dios al respecto. 

La Biblia no lo menciona

Usted puede estudiar las Escrituras de principio a fin, pero nunca encontrará un caso en el que la Eucaristía ayude a una persona muerta. Y ningún personaje de la Biblia recibió la Eucaristía en favor de un ser querido que había muerto. 
Como puede imaginar, esta tradición católica no sólo está ausente en la Palabra de Dios, sino que la contradice en forma directa. La Biblia enseña que cada uno de nosotros tendrá que dar cuenta por su propia vida: 

"De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí". Romanos 14:12 

Jesús hizo la obra completa

Nosotros podemos entrar al cielo únicamente por la buena obra de Jesucristo en la cruz. La salvación es un regalo de Dios, no algo que ganamos gracias a nuestra justicia o la justicia de amigos y seres queridos. Es porla justicia de Crsito es que somos salvos.



Después de la muerte, el juicio
La Biblia declara que después de la muerte, todos vamos ante Dios para ser juzgados. No hay más oportunidades: 

"Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio". Hebreos 9:27 

Quienes no creen en Cristo mientras tienen vida, ya están condenados al infierno: 


"El que en él (Jesús) cree, no es con-denado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios". Juan 3:18 

La ira de Dios está sobre aquellos que mueren sin Cristo: 

"El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él". Juan 3:36 

La Biblia no enseña que la ira de Dios se apacigua cuando alguien recibe la Eucaristía en favor de seres queridos que han fallecido. La única manera en que usted puede escapar de la condenación de Dios, es poniendo su fe en Jesucristo mientras usted tenga vida. Jesús declaró: 

"El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida". Juan 5:24 

"Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo". Colosenses 2:8

15 - María: Salvadora

María: Salvadora

¿Tiene María, la madre de Jesús, alguna participación en la salvación de la humanidad?

"En efecto, con su asunción a los cielos, (María) no abandonó su misión salvadora, sino que continúa procurándonos con su múltiple intercesión los dones de la salvación eterna..." (p. 281, #969). 


"Por su obediencia (María) fue causa de la salvación propia y de la de todo el género humano" (p. 140, #494).

¿Es bíblica esta doctrina? De acuerdo a la Palabra de Dios, María nunca ha tenido participación en el proceso de salvación. Las Escrituras revelan que Jesús es el UNICO que puede salvar:

"Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos". Hechos 4:12 


Jesús mismo declaró que El es el UNICO camino al cielo:

"Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí".
Juan 14:6 


"Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo".  Juan 10:9 


Sin embargo, el Catecismo afirma:

"La virgen María, unida con un vínculo indisoluble a la obra salvadora de su Hijo" (p. 340, #1172).

Una vez más, usted debe decidir a cuál creerá: la Biblia, o la tradición de la iglesia. La Biblia claramente dice:

"Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve".  Isaías 43:11 


"Mas yo soy Jehová tu Dios... no conocerás, pues, otro dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí".  Oseas 13:4 


"Dios mío, fortaleza mía... Salvador mío". 2 Samuel 22:3 


Antes que Jesús naciera, un ángel anunció que El sería el Salvador:

"Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados". Mateo 1:21 


Después del nacimiento de Jesús, el ángel repitió su mensaje:

"Os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor". Lucas 2:11 


Una y otra vez leemos que Jesús es el Salvador:

"... nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador del mundo, el Cristo".Juan 4:42 


"A éste (Jesús), Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador". Hechos 5:31 


"De la descendencia de éste, y conforme a la promesa, Dios levantó a Jesús por Salvador a Israel".  Hechos 13:23 


"Pero que ahora ha sido manifestado por la aparición de nuestro Salvador Jesucristo".
2 Timoteo 1:10 


"Gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y del Señor Jesucristo nuestro Salvador".
Tito 1:4 


"El cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador". Tito 3:6 


"... el Padre ha enviado al Hijo, el Salvador del mundo".  1 Juan 4:14 


Veamos las palabras de Pedro, a quien el catolicismo reconoce como su primer papa:

"... por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo".  2 Pedro 1:1 


"... en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo".  2 Pedro 1:11 


"... por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo". 2 Pedro 2:20 

Ciertamente Pedro sabía que el Salvador era Jesús, no María. Pedro glorificó a Jesús como Salvador, no a María:

"Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén".  2 Pedro 3:18 


El mismo apóstol Pedro declara:

"... fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación". 1 Pedro 1:18-19 


Indudablemente Jesús es el Salvador, no María. 

Conclusión


Los hechos señalados en este capítulo dejan varias preguntas que deben ser contestadas:

  • ¿Por qué la Iglesia Católica quiere que la gente acuda a María en busca de salvación, en vez de ir a Jesús?
  • ¿Por qué se le roba la gloria a Jesús para dársela a María?
  • Si María tiene un papel en nuestra salvación, ¿por qué Dios no lo declaró en su Palabra?
  • Más importante aún, ¿en quién confiará usted para su salvación: en la virgen María de la cual habla la tradición de la iglesia, o en el Señor Jesús de quien habla la Palabra de Dios?


"Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo".  Filipenses 3:20



16 - María: Fue Salva Desde su Nacimiento

María: Fue Salva Desde su Nacimiento


El catolicismo afirma que María nunca pecó y, por tanto, era redimida (salva) desde el momento de su nacimiento: 

"Por la gracia de Dios, María ha permanecido pura de todo pecado personal a lo largo de toda su vida" (p. 140, #493). 

"... aceptando de todo corazón la voluntad divina de salvación, sin que ningún pecado se lo impidiera, se entregó a sí misma por entero a la persona y a la obra de su Hijo" (p. 140, #494). 

"Ella, 'llena de gracia', es 'el fruto excelente de la redención'; desde el primer instante de su concepción, fue totalmente preservada de la mancha del pecado original y permaneció pura de todo pecado personal a lo largo de toda su vida" (p. 144, #508; véase también p. 212, #722). 

Si usted se está preguntando si la Palabra de Dios enseña esta doctrina, la respuesta es "no". El Catecismo admite que esta es otra tradición de la iglesia: 

"A lo largo de los siglos, la Iglesia ha tomado conciencia de que María 'llena de gracia' por Dios había sido redimida desde su concepción" (p. 139, #491). 

Pero la Biblia identifica a Jesús como el Unico que no conoció pecado, no a María: 

"Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él". 2 Corintios 5:21 

La Biblia enseña claramente que, aparte del Señor Jesús, nadie más ha sido como El, sin pecado: 

"Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios".Romanos 3:23 

"Como está escrito: No hay justo, ni aun uno".Romanos 3:10 


"Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno".
Romanos 3:12 

Como puede ver, ninguno de estos versículos dice, "todos pecaron, excepto María". 

"Mas la Escritura lo encerró todo bajo pecado...". Gálatas 3:22 


María sabía que necesitaba un Salvador

En el evangelio de Lucas, María admite que era pecadora. De lo contrario, nunca habría dicho que necesitaba un Salvador: 

"Entonces María dijo: Engrandece mi alma al Señor; y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador".
Lucas 1:46-47 

Sin embargo, la Iglesia Católica demanda que sus seguidores adoren a María: 

"La piedad de la Iglesia hacia la Santísima Virgen es un elemento intrínseco del culto cristiano" (p. 282, #971). 

¿Exaltó Jesús a María?


Cierto día cuando María pidió ver a Jesús, El se refirió a su madre de esta manera: 

"¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos? Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre". Mateo 12:48-50 

Jesús no dijo: "Dejen entrar a esta mujer bienaventurada". Más bien respondió que cualquiera que obedezca la Palabra de Dios, es igual a María. Jesús rehusó exaltarla. 

Cuando otros exaltaron a María

En cierta ocasión, una mujer se acercó a Jesús e intentó exaltar a María, pero veamos cómo respondió el Señor: 

"... una mujer de entre la multitud levantó la voz y le dijo: Bienaventurado el vientre que te trajo, y los senos que mamaste. Y él dijo: Antes bienaven-turados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan".
Lucas 11:27-28 


Jesús anunció que quienes escuchan y obedecen la Palabra de Dios, son bendecidos aun más que María. Quizá el Señor incluyó estos versículos para aquellos que ahora eligen ignorar la Palabra de Dios para seguir las tradiciones de una iglesia. 

Un patrón

Siguiendo el patrón que hemos visto a través de este libro, una vez más se le roba a Jesús la gloria y el honor que sólo El merece. En vez de reconocerlo como el Unico que no conoció pecado, el catolicismo contradice a la Biblia y sostiene que María tampoco conoció pecado. ¿Por qué?

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